A mi eterna musa
A mi eterna musa
Samuel Hernández Rodríguez.
Nació en La Moncada, municipio de Tarimoro, en el estado de Guanajuato, México.
Empezó a escribir versos desde muy pequeño, la facilidad para las rimas, la musicalidad y la temática fueron cualidades innatas. Sus familiares, y más tarde sus profesores, lo motivaron a seguir escribiendo; y él fue siempre ¬el a su Musa.
Terminó sus estudios elementales y de secundaria en su pueblo natal y cursó su bachillerato en humanidades en el Seminario Tridentino, “San José de la montaña”, de la ciudad de Morelia, Michoacán. Fue allí donde recibió la influencia directa de todos los poetas clásicos y contemporáneos. Ávido lector de todo y de todos se dio cuenta que hay un sólo poeta que es Dios, y todos los demás son sólo mensajeros.
Sabiendo eso, no puede dejar sus poesías guardadas en un baúl; no le pertenecen, le pertenecen a todos los que buscan despertar los más sublimes sentimientos, porque las poesías no son de Dios, que es quien las crea, ni del poeta que es el que las escribe, son de todos ustedes, porque ustedes les dan vida y las inspiran.
Disfrútenlas, enamórense, lloren, pero sobre todo, no dejen de soñar, el mundo necesita más poetas locos que soldados cuerdos, y recuerden que el amor nunca muere y de vez en cuando nos visita con el recuerdo de lo que bien amamos.